Estamos de manteles largos por la visita a México del
representante de Dios en la Tierra, y en Pildorita
le rendimos tributo recordando ÉSTE educativo escrito.
3 comentarios:
Anónimo
dijo...
Ni hablar, ni hablar.
Oye, resulta que estos últimos tres días, en mi ciudad, Conarte llevó a cabo el evento La Degramaticalidad increible, y el programa indicaba a un tal Rodrigo Solís y me emocioné. Y nada, que era un defeño, pero valió mucho la pena. Hoy, cuando le dije que había otro Rodrigo Solís, me platicó que él ha concedido algunos de tus escritos a revistas sin darse cuenta. Me sentí poseedora de un pequeño tesoro.
Jajajajaja, nah, no creo que sea verdad. Digo, si a tí te pidieran la autorización para los textos de él entonces sí. Aunque bueno, a él lo troleó Sergio Cordero, quien se hace llamar el crítico implacable, y fue bien divertido, ojalá hubiera un video; le dijo muy groseramente que no se creyera mucho porque no era el primero que escribía y se subía a una bicicleta (el primero fué él, jajaja), le recomendó un texto suyo y le dijo que le divertía su trabajo.
3 comentarios:
Ni hablar, ni hablar.
Oye, resulta que estos últimos tres días, en mi ciudad, Conarte llevó a cabo el evento La Degramaticalidad increible, y el programa indicaba a un tal Rodrigo Solís y me emocioné. Y nada, que era un defeño, pero valió mucho la pena. Hoy, cuando le dije que había otro Rodrigo Solís, me platicó que él ha concedido algunos de tus escritos a revistas sin darse cuenta. Me sentí poseedora de un pequeño tesoro.
Hay días en que pienso que mi otro yo es quien realmente vive la vida glamurosa del escritor
Jajajajaja, nah, no creo que sea verdad. Digo, si a tí te pidieran la autorización para los textos de él entonces sí. Aunque bueno, a él lo troleó Sergio Cordero, quien se hace llamar el crítico implacable, y fue bien divertido, ojalá hubiera un video; le dijo muy groseramente que no se creyera mucho porque no era el primero que escribía y se subía a una bicicleta (el primero fué él, jajaja), le recomendó un texto suyo y le dijo que le divertía su trabajo.
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