Nacer con la angustia tatuada en el rostro, no ayuda mucho en el deporte, ni en ninguna profesión. Sergio Bernal, un portero de personalidad tan gris como su cabellera, cuelga los guantes luego de una carrera de más de 20 años, plagada de sinsabores, pero que en la recta final, se le hizo justicia: el único jugador de los Pumas en levantar 4 campeonatos de liga.
Ayer, Sergio dijo adiós, y a mí, la verdad, se me salieron las lágrimas también.
http://youtube.com/watch?v=JHt9tR6HC7c
En Pildorita de la Felicidad, le rendimos un merecido homenaje con el escrito El hombre que desentona
1 comentario:
que informacion tan estupida como tu esptupidito de menta babosooo
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