Según un artículo publicado por el profesor Benny Shanon de la Universidad Hebrea de Jerusalén, Moisés (oh, sorpresa) muy probablemente estaba bajo la influencia de drogas psicotrópicas cuando confundió un arbusto en llamas con el mismísimo Dios, y todavía más cuando el propio Sanguinario Señor del Universo le entregó las tablas de la ley.
No lo saco a colación para molestar a los ingenuos que se creen las patrañas que dice la Biblia (¿por qué detenerse ahí? ¿qué les impide creer también que la Épica de Gilgamesh o Los Nibelungos narran sucesos reales?), sino para aprovechar la bonita foto de Moisés sobre un elefante rosa ("Yavé", como él lo llama) que ven sobre estas líneas.
Curiosamente, la nota en inglés nos dice que Moisés se drogaba, pero la versión en español dice que eran "los israelíes mencionados en la Biblia" (¿?) los que estaban drogados. ¿A qué se deberá la diferencia entre ambas versiones?
Por más que lo intentamos, fue imposible localizar a Jesús para preguntarle su opinión al respecto. Según los especialistas de la Unidad de Sentido Común de Pildorita de la Felicidad esto se debió a que Jesús, si existió, murió hace aproximadamente 1,974 años y los muertos no hablan, contrariamente a lo que piensan ciertas señoras pendejas que juran y perjuran que diosito habla con ellas y les da instrucciones precisas y detalladas para fastidiar al prójimo (no voy a decir nombres, ellas saben quiénes son).
2 comentarios:
Maaa! Deja que lo vean, a ver si sales de esta!!!
El respeto al derecho ajeno es la paz.
Saludos, Bomberito.
Jajaja. Qué buena referencia a Tom Wolfe.
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