Cliché busca a Clichá

Miguel, 1.80 mts. Idealista, radical, irreverente, iconoclasta. Adicto a la cafeina, al tabaco, a la literatura y al buen cine. Me importa poco cómo me califiques. Me late conocer personas librepensadoras, INTELIGENTES, con amplio criterio por favor.

Chicas, por favor, no se sientan intimidadas. Que un hombre sea idealista (que representa las cosas de una manera ideal, es decir, que profesa la doctrina del idealismo, o lo que es lo mismo, que considera la idea como principio del ser y del conocer), radical (partidario de reformas extremas, especialmente en sentido democrático, o lo que es igual, un tipo extremoso, tajante e intransigente), irreverente (contrario a la reverencia o respeto debido), iconoclasta (hereje del siglo VIII que niega el culto a las sagradas imágenes, las destruye y persigue a quienes las veneran, que niega y rechaza la merecida autoridad de maestros, normas y modelos), adicto a la cafeina (sin acento en la “i”, un derivado del alcaloide, con propiedades cardiotónicas, que se obtiene de las semillas y de las hojas del café, del té y de otros vegetales), al tabaco (planta de la familia de las Solanáceas, originaria de América, de raíz fibrosa, tallo de cinco a doce decímetros de altura, velloso y con médula blanca, hojas alternas, grandes, lanceoladas y glutinosas, flores en racimo, con el cáliz tubular y la corola de color rojo purpúreo o amarillo pálido, y fruto en cápsula cónica con muchas semillas menudas; planta de olor fuerte y narcótica, no confundirlo con el cigarro puro como Marlboro, Camel, y demás marcas mortales), a la literatura (toda la literatura sin excepción, es decir, al conjunto de producciones literarias de todas las naciones, de todas las épocas y géneros existentes y extintos) y al buen cine (buenos y lujosos locales donde como espectáculo se exhiben obras cinematográficas como "Lola la Trailera" o "Tres lancheros muy picudos") no significa que deban asustarse, sino todo lo contrario, pues todas estas cualidades que no hacen sino convertir a este cotizadísimo galán en un ser único; una persona a la que importa muy poco cómo lo califiques, pues a él LE LATE (expresión Homérica, Cervantesca o Shakesperiana, no sabemos cual de las tres) conocer a personas (no especifica si deben ser hombres o mujeres, lo cual ratifica como el librepensador que clama ser) librepensadoras (personas que comulguen con la doctrina que reclama para la razón individual independencia absoluta de todo criterio sobrenatural), INTELIGENTES (con mayúsculas para que quede bien claro que es la cualidad más importante que busca en una persona: que esté dotada de un grado elevado de inteligencia o que sea sabio, perito e instruido en el arte de la sabiduría) y de amplio criterio (persona con una extensa, dilatada y espaciosa norma para conocer la verdad, el juicio o el discernimiento).

Sin embargo, nuestro hombre del Renacimiento de 1.80 metros de altura (por alguna misteriosa razón es la única característica física que le interesa darte a conocer) está dispuesto a conformarse con que seas una mujer con un par de tetas bien grandotas o en su defecto un hombre musculoso con el miembro enorme, o al menos que te parezcas a cualquiera de los chicos de Il Divo (de preferencia con el miembro nudoso y enorme).

Nunca se es demasiado viejo para aprender:

Jean Paul Sartre y Simone de Beauvoir escuchan con interés la fascinante perspectiva de Miguel con respecto al existencialismo. Algo que pocos saben es que Simone de Beauvoir conoció a Nelson Algreen precisamente gracias a un mensaje que colocó en Sexyono; sin duda, la opción de la gente culta que desea conocerse.

Idealistas, radicales, irreverentes e iconoclastas 4-ever:
Fidel, Ernesto y Miguel intercambian tips para fruncir el entrecejo.