lunes, 11 de agosto de 2008

Somos chatarra



“UN CONSERVADOR ES UN HOMBRE DEMASIADO COBARDE PARA LUCHAR Y DEMASIADO GORDO PARA HUIR.”

- Elbert Hubbard


Justo ahora que han dado inicio los Juegos Olímpicos (tomen nota), nuestros astutos mandatarios han lanzado al aire una campaña para combatir la obesidad. Por favor, un aplauso para ellos, que al parecer alguien ya les ha informado que somos el país más obeso del mundo luego de Estados Unidos.

El comercial que vi ayer fue muy conmovedor. Palabra que hasta se me escurrieron unos lagrimones por las mejillas. Snif, snif. Era uno (con seguridad lo habrán visto ya) en el que aparece una señora dándole de comer a sus retoños unas manzanas. “No quiero heredarles la diabetes, por eso los acostumbro a comer sanamente”, dice la señora (o alguna ridiculez por el estilo).

Quién diría que a estas alturas de la evolución humana los políticos ya ni siquiera tienen tacto para darnos atole con el dedo. No señor. Ahora nos dan cucharadas. Y bien grandotas. ¿Acaso el gobierno creerá que con una campaña tan tontorrona como “Vivir Mejor” vamos a dejar de ser unos gordos despreciables? ¿Pensarán que con contratar artistuchos de quinta (que para colmo están pasados de peso) que nos aconsejen subir las escaleras en vez de utilizar los ascensores del trabajo mágicamente vamos a dejar de costarle millones de pesos al Seguro Social porque nuestras venas tienen más azúcar que los ríos de chocolate de Willy Wonka?

Bien, ahora si me disculpan, les voy a platicar una parte de mi infancia y mi adolescencia, mismas con las que sospecho (sin temor a equivocarme), cada uno de ustedes se identificará, sin importar a qué escuela hayan asistido, sea pública o privada, religiosa o laica.

Riiiiiiiing. Esa es la campana que nos avisa que es la hora del descanso. Salgo disparado del salón de clase y me formo detrás de una interminable fila de niños que hacen cola para comprar un refrigerio en la tiendita. Ni siquiera es medio día y mis tripas chillan de hambre (les prometo que no entiendo por qué) muy a pesar de que en el desayuno comí un cereal azucarado y/o de muchos colores que decía tener 7 vitaminas y hierro. Para apaciguar el hambre tengo muchas opciones a escoger: todas ellas son refrescos embotellados, pastelillos y frituras de diversas marcas. Chomp, chomp. Slurp, slurp. Las dos últimas horas de clase intento prestar atención a lo que dice la maestra pero no puedo porque tengo mucho sueño, y también mucha hambre. Riiiiiiiing. Esa es la campana que nos informa que es la hora de la salida. Salgo disparado del salón de clase y vuelvo a formarme en otra interminable fila de niños detrás de un carrito donde un señor nos vende golosinas como las que venden en la tiendita del colegio. Ahora, viéndonos primermundistas, digamos que el calendario escolar tiene 200 días de clases efectivas. Multiplique esos 200 días por 12, que son los años que dura la primaria, la secundaria y la preparatoria juntas.

¿Ustedes creen que un ser humano que creció durante 12 años de su vida consumiendo comida chatarra de buenas a primeras va a dejar de consumirlas, en su casa y en su trabajo, ahora que es un adulto y tiene poder adquisitivo?

No nos hagamos tontos. Si tuviéramos un gobierno responsable que quisiera ayudar en verdad, simplemente prohibiría la chatarra envenenada que entra tan campante a todas las escuelas del país, pues a diferencia de los adultos, los niños no saben discernir qué alimentos son los adecuados para su organismo. Pero, adivinen qué: ¿sabían que los mayores ingresos que tienen las escuelas luego de las colegiaturas los obtienen de lo que venden en las tienditas? ¿Y sabían que los emporios de comida chatarra obtienen sus mayores ganancias de lo que venden en las escuelas? ¿Y sabían que esos emporios de comida chatarra, cada que hay elecciones, filtran parte de sus utilidades para apoyar las campañas de los políticos que nos gobiernan? ¿Y sabían que esos emporios le dan empleo a cientos de miles de trabajadores mexicanos? ¿Se imaginan qué ocurriría si los emporios dejaran de vender su chatarra a nuestros hijos por culpa de un testarudo político al que se le ocurriese, no sé, digamos, hacer una reforma alimenticia? ¿Quién es el valiente de los políticos que dice “yo”?

Ya me lo imaginaba. Por eso somos y seguiremos siendo, por los siglos de los siglos, o hasta que el mundo reviente en mil cachitos (lo cual espero ocurra pronto), la medalla de plata en la carrera de gordos, y eso solo porque en Estados Unidos ocurre exactamente lo mismo que aquí.

Ven, somos chatarra, o mejor dicho, peores que la chatarra.

15 comentarios:

Anónimo dijo...

que pena!!
hay que leer maestros, si te informas desde cuando entro en vigor el programa vivir mejor, te vas a dar cuenta que ya tiene casi un año brindando asistencia nutricional y medica a los niños desde preescolar(tanto de escuelas publicas como privadas) se les brindan desayunos nutritivos, actividades deportivas, talleres y demas actividades relativas a la salud.
Yo no soy panista ni nada, ni me cae bien calderon; pero hay que ser honestos cuando hay voluntad para trabajar y para resolver un problema como este. Si te dieras una vuelta por estados unidos te darias cuenta que ellos no hacen nada para resolver su problema de obesidad en la poblacion, al contrario motivan a su "white trash" a que sigan consumiendo mc donalds, BK, wendy'd y toda esa basura como simbolos de su falso nacionalismo.
Seria mas facil si el gobierno le rehuyera a ese problema, se evitaria muchas criticas como la tuya; pero deciden combatirlo.
Ojala y nos dedicaramos a apoyar los intentos del gobierno por mejorar la salud de los mexicanos, en lugar de simplemente criticar.

Saludos
Marco Rodriguez Cruz

pd:no vayan a creer que soy mouriño fingiendo una identidad secreta, ni algun secuaz del panismo, soy simplemente un humilde mtro de educacion fisica al que le parece justo reconocer a este excelente programa

Anónimo dijo...

Nuestro sistema alimnetaio y nuestro sistema deportivo son una miercoles...

Almenos en EEUU tienen la libertad de elegir entre llevar un nivel de vida sana y no llevarlo... Nostros no tenemos opción...

Quizás los mismo gringos sean el unico país mas obeso que nosotros, pero tambien son el país que probablemente mas medallas gane en los presentes juegos olimpicos quizá solo quedaría detrás de la misma China que tiene por cierto un control del deporte mayor que en norteamerica y mejor alimentación...

Salud! con coca cola... de 2 litros...

EL tocayo, del tocayo del tocayo...

Anónimo dijo...

jajajaja P.D. NO VAYAN A CREER QUE SOY MOURIÑO FINGIENDO UNA IDENTIDAD SECRETA...

una de dos o es Mouriño o uno de sus achichincles.

Los que menos deben abrir la boca son los mastros de educacion fisica, la mayoria son unos ineptos, nada mas vean cuantas medallas hemos ganado

Anónimo dijo...

Mi estimado tocayo: admiro cada uno de tus correos, rio, razono dándote cada vez más la razón, y pienso que si México tuviese unas 1000 personas más como tú se haría la gran diferencia, pero esta última si te quedó muy mal, o más bien te viste algo ignorantón del tema. Soy nutriólogo y he estado metido en proyectos en contra de la obesidad en México, y después de analizar cada punta de cada pelo del oso grisli en el que se ha convertido casi la mitad de adultos mexicanos, especialmente los que viven malinchistamente en EU con la mísera escusa de que no les alcanza con lo que ganan en México. Mi corta opinión al respecto se podría resumir en que con algunas monedas en la bolza, y la cabeza llena de ignorancia en materia de alimentación, como la gran mayoría de los mexicanos (y mexicanas) de todas las clases, hemos logrado acumular más energía que la liberada por una supernova en plena exlplosión. Pues así como el cosquilleo genital le gana a los adolescentes entre 12 y 19 años en México para probar su primer remojon, el inchi antojo de alguna golosina con la última imagen que vieron en la tele de alimentos chatarra, o hidratos de carbono de a peso el Kg, le gana a todo mundo para probar su primer alimento y último del día (o desde su primer hasta su último...). La clave está en la educación, en la concientización, en el ejemplo, y nada más.

Te recomiendo ver "Superengórdame" o Supersize me en inglix..

SALUDOTES!

Calixta dijo...

Esta bien... voy a protestar.
El programa de vivir mejor no me parece malo del todo, tiene sus chispas de ser un bien para la nación, aunque no es la octava maravilla.
Ahora bien, sucede que como alguien antes que yo acertadamente comento, la diferencia entre USA y México radica en el poder de decisión; Un mexicano promedio no puede darse el lujo de comer "sanamente" simplemente porque comerte los tacos de la esquina te sale más barato y mantiene a las tripas a raya por más tiempo. Lo de los deportes es cuestión de hábitos, mismos que desgraciadamente el gobierno no se ha preocupado por estimular (algo parecido a la lectura) las famosas clases de educación física no contempla que cada niño o joven es diferente y por lo mismo deben de tener regimenes diferentes en cuanto a ejercicios deportivos se refiere, además que como sucede en las clases de aula, sólo sobresalen los que tienen ciertas aptitudes para el futbol, el basquet o el voley (porque en México no existen mas deportes). La educación artistica, no explora el baile como actividad fisica y ya no se diga de variar los ritmos.
El problema de la obesidad de México es cuestión de cultura, y es ahi donde también los padres debemos de tomar nuestra responsabilidad; esta bien que el domingo no queramos cocinar y compremos fritangas para el desayuno o que tengamos la comodidad de tener un auto en casa, pero debemos procurar que nuestros hijos disfruten de saborear comidas caseras con todas sus porciones de vegetales y al menos preparar aguas de frutas naturales, que a la larga sale mas barato. Y por favor, al menos los provincianos como yo, aun tenemos areas verdes donde podemos disfrutar de caminatas con nuestros hijos, ay! ellos se conforman con tan pocas cosas (si asi los educas)como andar persiguiendo pompas de jabon por el parque.
No se si les importe pero a falta de estimulo yo solo soy buena en la matatena, unico "deporte" que practico con pelota... jajajaja.
Un gustazo pasar por su blog, remitida claro esta desde Emula...
XOXO

Anónimo dijo...

Como siempre, simpatiquìsimo pero muy atinado. Felicitaciones y que continuès siempre asì.

Un abrazo de LUigi

Anónimo dijo...

Tampoco es cosa de echarle la culpa a los gringos o al gobierno, ya que es un pais de gordos desde hace mucho tiempo y la cochinita, los sopes y las carnitas son igual de sanos que una hamburguesa de macdonalds, incluso es un hecho que ahora nos cuidamos mas que antes independientemente de las campañas del gobierno.
En mi opinion tampoco hay que perder de vista la cantidad de hormonas que tiene la comida que comemos tanto carnes como vegetales, vamos comemos pollos de 3 dias de nacidos y si te acuerdas del pollito que todos tuvimos sinedo niños a los 3 dias estaba igual que a las 2 semanas, chiquitito.
En ese punto el gobierno es totalmente culpable y por ahi deberian de empezar ya que no hay pais en el cual los empresarios de todos los giros puedan hacer lo que se les de la gana como en Mexico

Anónimo dijo...

Qué problema tienen con los gordos?? Quien quiera estar gordo, en fin, que lo esté, por qué esta "dictadura de la salud"? Por qué este deseo de tener los cuerpos que no tenemos, de ganar las medallas que NO VAMOS a ganar? De llegar a los 80 años como si eso fuera un privilegio y no una condena (se imaginan andar de molestosos en casa de nuestros familiares)?
Una de las cosas que más me dan risa es cuando le preguntan a alguien "Qué deseas para este año" y dicen: "Salud". Por qué mienten? Por qué no dicen: "Dinero, total, la salud viene y va"?
Además: Por qué todo lo tiene que hacer el gobierno? Que si no hay lectores, es el gobierno; que si somos gordos, el gobierno; que si los campesinos están jodidos y no han llegado a ser competitivos, el gobierno; coño, aceptemos que somos ignorantes, que somos gordos y que somos flojos (no todos, pero hay un chingo) y que hay un componente absolutamente individual para hacer las cosas bien o no hacerlas. O creemos que somos como los perros de Pavlov que solo reaccionamos a las campañas ya sea de lectura o de salud???

Anónimo dijo...

¿maestros de educacion fisica?, chale, nomas vean: el director del Indecam un regordete con pinta de diabetico extraido de "el basurero municipal"; el director de deportes de la UAC un gordinflon que apenas puede con su humanidad y los "maestros de educacion fisica de las escuelas primarias y secundarias" son gorditos, ja ja ja ¿cual preocupacion?.

Anónimo dijo...

El gobierno no se tiene la culpa de nada. Pero como buenos mexicanos, hechénle la culpa a otros.

Anónimo dijo...

El gobierno no se tiene la culpa de nada. Pero como buenos mexicanos, hechénle la culpa a otros.

Anónimo dijo...

Te diré, de niña no engordé tanto porque como mis papás no tenían mucho dinero, no me compraban helados ni galletas, ¿pero qué pasó? Como tu dices, cuando uno ya es adulto, bien que "se consiente", y en mi caso, me comí todo lo que no comí en la infancia, hasta que la báscula empezó a protestar y tuve que disciplinarme en ello. Y a mi pobre hermano, que está creciendo con unos padres bastante más consentidores (y con más money), pues sí, le está pasando, que le dan más comida chatarra que nutritiva.
En fin, la otra parte es que la publicidad también hace de las suyas :-(

Noticias Galicia (España) dijo...

Publicado en:

http://www.noticiasgalicia.com/articulos/articulo399.html

La Jornada (Nicaragua) dijo...

Publicado en:

http://www.lajornadanet.com/diario/opinion/2008/agosto/111.html

MILENIO NOVEDADES (Yucatán) dijo...

Publicado en:

MILENIO NOVEDADES 10 AGO 08