Si analizas a los pandas, no encontrarás oseznos más reales en otro cartel del mundo. La mirada asesina de este par, nos lleva a creer que han terminado de devorado a sus victimas, un festín de niños; acto seguido, se disponen a engullir los regalos del festejado.
¿Acaso una madre de familia en su sano juicio, contrataría el salón de fiestas Los Pandas para celebrar el cumpleaños de su retoño, a sabiendas de que en cualquier momento pueden aparecer criaturas sedientas de sangre? ¡Desde luego!
2 comentarios:
qué paso? Tienes hueva, porque a esta neta que le falto algo, un mucho.
Es más, a mí los osos panda me parecieron autistas.
Sí, si pagaría si la dueña del lugar fuera Yuri y enseñara su osito panda, y además cantara su canción del osito panda en lenguaje de sordomudos
Definitivamente no se ven sedientos de sangre, pero sí es de llamar la atención que no hayan puesto a un pandita amigable y sonriente... parece que los invitados de la fiesta huyeron al ver a los pandas, y los bichos estos están buscando algo de comer entre los regalos.
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